Seguir a @B_Nitsch

viernes, 4 de noviembre de 2011

Cuando te fuiste...

 Le dio cuerda al reloj, pero no puso a andar ese sistema energético del péndulo, para que ella no se fuera nunca y el tiempo, nunca, nunca pasara...para soñar despierto entre sus brazos y ahogarse de suspiros en su boca, y verter el alma por sus manos, y difundir hasta las venas para embriagarla de amor y ternura. Tan solo eternamente, eterna-eternamente... pero todo fue en vano..., ella se fue y al volverse hacia el reloj, el péndulo se movía y los segundos viajaban de este hasta sus oídos...y un grito de dolor desde su interior le erizó la piel, como nunca antes...

1 comentario: